miércoles, 11 de noviembre de 2015

o t o ñ o

Tu lado de la cama habitado por dos fantasmas.
Tu sombra llorando la pérdida de la otra.
Se acerca Caronte
Hacia mi orilla
Al verlo todo abarrotado de pesadillas,
Como en Matrix,
Me ofrece dos pastillas,
Dos salidas.
Me pregunta cuanto tiempo llevo sin ver amanecer
Le respondo con la voz rota 'desde que se fue',
Me invita a subir a su barca
Le digo que no tengo nada que ofrecer,
Tengo las deudas que suponen el ayer,
A veces el pasado nos alcanza
Te giras y no hay nada,
Nada que hacer.
Me dice que lo deje
Me pregunta que si pudiera elegir
Hacia donde equilibraría la balanza
-La vida
O la muerte-
Que el valor de estar viva reside en el ahora
Que me tome un tiempo,
Respire,
Escuche el mar colisionar contra rocas,
Y mis pensamientos irse con las olas.

Y así fue como el gran maestro de la muerte me enseñó a vivir
Ya lo ves,
Era o t o ñ o,
Tiempo de caídas por aquí...


Pero por mucho que lloro en la orilla creyendo que la marea alivia...
Solo tiro mi dolor a un insensible e inmenso mar.
Y no me responderá. Lo olvida, como vosotros, y todo será igual.
Volveré a contrarreloj al principio del final,
A mi espiral.
Como esas personas que no se nota por fuera
pero dentro se consumen como un fuego que se apaga.
Como esa estación donde todo se marchita,
El llanto que hace estallar mi risa y mi cordura.
Y no llega el tren que lleve mis raíces a Flora,
Por eso soy somos esclavos del dolor de nuestra sonrisa.


Si es en la oscuridad donde mis ojos mejor se adaptan,
Porque me cansé de buscar la luz y de intentar atrapar mi cola,
Ahora colisiono contra mi propia sombra,
No hay más secreto que el reflejo que intenta salir del cristal.
Que yo sólo no puedo si no estoy conmigo, un alma rota llora,
Se encierra en su propia cárcel y no firma pactos para reducir condena,
Como los barrotes, la llave es ficticia, no se da cuenta.
Sucia gangrena.


Pero después de todo... Este dolor es nuestro.
Es un arma secreta, un apoyo fuera de la vista.
Un tic-tac, con los últimos copos de invierno
Y mi mirada perdida
En la que se reflejan todas mis pérdidas,
Mis llamadas y horas perdidas, mis mil perdones a deshora.
Mis ganas de destruir nuestras fortalezas
y unirnos en un único problema.
Porque cuando corro y huyo sólo ese dolor es la única salida.
Porque un mar, ni tu, no entenderían ni una lágrima.
Por eso hemos hecho de la utopía nuestra forma de vida,
Por eso cada anochecer trazamos en otras espaldas nuestra huida,
Porque somos la soga y el cuello 
(del suicida)

(Porque...sin ti... no volvería a llegar a tiempo a la vida)


MissRuines y @JotaD97

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